La aparición de diversas herramientas de desarrollo web ha facilitado la creación de sitios web a un público más amplio. Esto es en gran medida positivo, ya que cada vez más personas pueden tener un sitio en internet de manera sencilla y sin muchas complicaciones.
Pero, esta democratización también ha generado un problema menos evidente: la sostenibilidad de los sitios web que estamos creando. Muchas veces he visto cómo se utiliza WordPress o herramientas similares para hacer algo tan simple como una landing page, y el resultado es que la página que debería ser pequeña y sencilla se convierte en un monstruo digital de varios cientos de megabytes con muchas funciones innecesarias y una estructura de base de datos y generación dinámica de contenido que no es necesaria.
Es cierto, podemos pensar que en realidad no importa, que nuestro cliente pagará los gastos de alojamiento y mantenimiento sin problema porque quiere tener esa landing page, o incluso que estamos ahorrando tiempo al partir de una estructura ya montada.
Pero, la realidad es que sí importa. Debemos empezar a ser conscientes del consumo energético de nuestros servidores y valorar un uso racional del espacio de almacenamiento digital. Vivimos en un mundo en el que cada vez se presta más atención a la gestión de los residuos físicos y al uso racional del suelo, y donde se optimiza el stock de material y se recicla, pero poco se hace en el mundo digital. Es hora de cambiar esto y empezar a ser más responsables en el mundo digital.
El desarrollo web responsable se ha vuelto cada vez más relevante en el mundo digital. ¿Por qué? Porque ofrece múltiples ventajas en términos de sostenibilidad, accesibilidad y rendimiento. Aquí te explicamos algunas de ellas:
Consumo energético reducido: Al optimizar el código y los recursos utilizados en una página web, se logra un menor consumo de energía y un impacto ambiental más bajo.
Uso eficiente del almacenamiento digital: Al emplear herramientas y estrategias de optimización, es posible ahorrar espacio en los servidores y mejorar la experiencia del usuario.
Mejora en la velocidad de carga: Una web optimizada y responsable carga más rápido, lo que conduce a una mayor satisfacción de los usuarios y una reducción en la tasa de rebote.
Accesibilidad para todos: Al diseñar y desarrollar sitios web accesibles, se permite a un público más amplio acceder y navegar por ellos, lo que puede mejorar la experiencia de usuario y aumentar la conversión.
Imagen positiva: Adoptar prácticas responsables en el desarrollo web puede mejorar la imagen y reputación de la empresa y diferenciarse positivamente de la competencia.
En definitiva, el desarrollo web responsable es una oportunidad para mejorar la experiencia de usuario, reducir el impacto ambiental y reforzar la imagen y reputación de la empresa. ¿Qué más se puede pedir?